Existen musicales que optan por utilizar recursos propios del género pero los usan de forma muy original y dan por resultado películas muy interesantes.
A los musicales los precede su reputación. Con ellos no hay medias tintas: o se les ama o se les odia, jamás un punto medio. Muchas pueden ser las razones de estas polarizaciones, la música, los diálogos cantados, los temas fantasiosos o la teatralidad de las escenas y personajes. Estos elementos son significativos para cada lado de la moneda de la estima que se le puede tener a los musicales.
En esta ocasión, nos centraremos en algunos musicales que bien pueden gustar a los más reacios a los mismos. Y es que, por fortuna, como en casi todo lo que tiene que ver con el arte, existen muchísimas opciones y variantes dentro de un mismo género.
Apegarse a la idea de que todos y cada uno de los musicales no nos van a gustar (también aplica al contrario) es una generalización peligrosa
Apegarse a la idea de que todos y cada uno de los musicales no nos van a gustar (también aplica al contrario) es una generalización peligrosa: puede que estemos dejando fuera interesantes propuestas o metiendo en el mismo costal obras que no suponíamos se catalogaban en dicho género.
Cuando escuchamos la palabra musical pueden venir a la mente algunas imágenes: películas de época, niños simpáticos cantando tragedias o, en todo caso, escenas que ya están en la imaginación colectiva con musicales como Bailando bajo la lluvia, Sonrisas y lágrimas, Mary Poppins con su: Supercalifragilisticoexpialidoso (8) y muchas más.
Pero lejos de insistir en la musicalidad y la frescura de estos musicales los dejaremos intactos para centrarnos en aquellos que se encuentran lejos del formato clásico de musical y, aunque optan por utilizar recursos propios del género los usan de forma muy original, dan por resultado películas muy interesantes. Veamos qué tal sale el ejercicio para congraciarnos con este género tan incomprendido.
Labyrinth
Esta película de 1989 dirigida por Jim Henson y protagonizada por el mismísimo David Bowie y Jennifer Connelly es una preciosa historia de fantasía. Un clásico, sobre todo para aquellos que fuimos niños en los noventas. Los divertidos personajes de Henson, así como la genial música de David Bowie, la convierten en la candidata perfecta para ser recomendada a quienes no aman los musicales, particularmente porque tiene una dosis perfecta de números musicales.
The Nightmare Before Christmas
Subamos un poquito la marca de números musicales durante la cinta con la siguiente recomendación. No olvidemos que esta maravillosa película hecha con stop-motion fue escrita y producida por Tim Burton y dirigida por Henry Selick. El genial compositor Danny Elfman (que hace una excelente mancuerna con Burton) fue el encargado de la banda sonora e incluso de interpretar algunas de las canciones. Una muestra fantástica de animación y música, sin duda, única en su estilo.
Dancer in the Dark
Vayamos a otro ejemplo de películas únicas. Esta cinta de Lar von Trier es protagonizada por Björk; además, en el reparto se encuentran Catherine Deneuve, David Morse y Peter Stormare. Este drama perteneciente al llamado "dogma 95" tiene peculiares temas musicales, todos compuestos por Björk. Las canciones por su parte, aportan elementos a los personajes principales que los hacen muy interesantes. Existen muchas opiniones encontradas sobre esta película pero, sin duda, rompe muchos de los esquemas de los dramas y musicales puros, por esta razón se encuentra en estas recomendaciones.
The Blues Brothers
Para dejar el lado amargo podemos irnos al lado opuesto con esta película cómica interpretada por Dan Aykroyd y John Belushi, y dirigida por John Landis. Con esta historia que trae consigo un montón de música y músicos invitados nos muestran la cara divertida de los musicales. Esta película nació gracias a un sketch realizado para Saturday Night Live; en ella podremos disfrutar de artistas como: James Brown, Cab Calloway, Aretha Franklin, Ray Charles y John Lee Hooker.
Pink Floyd The Wall
Ah, Pink Floyd The Wall. Esta película puede ser la ideal para derribar la idea más reacia a caer sobre los musicales. Sobre todo para aquellos fanáticos de la agrupación británica. Bueno, bueno, dirán, pero esto no es un musical. Pero sí que lo es; el concepto básico de musical es el siguiente: es un género teatral o cinematográfico en que la acción se desenvuelve con secciones cantadas y bailadas, Tear down the wall!
Alan Parker es el director de la adaptación cinematográfica del impresionante álbum "The Wall" que fue lanzado en 1979. La película fue estrenada en 1982, el guion estuvo a cargo del mismísimo Roger Waters y contiene un sinnúmero de metáforas visuales y simbolismos, en fin, un trabajo que se puede disfrutar lejos, muy lejos, del musical tradicional.
Tommy
Por la misma línea se encuentra este musical de 1975 basado en la ópera rock de otra reconocida banda británica: The Who. Se trata de una excéntrica adaptación del álbum del mismo nombre que narra la historia de Tommy, un pequeño niño que sufre las consecuencias de perder a su padre en la Segunda Guerra Mundial, y su realidad inmediata luego de varias tragedias; ¿suena familiar? Tanto "The Wall" como "Tommy" pueden ser vistos como testimonios de esas generaciones que se vieron divididas y transformadas por la Guerra.
En la película dirigida por Ken Russell participan los integrantes de The Who, Roger Daltrey interpreta a Tommy; también se encuentran en el reparto: Tina Turner, Elton John, Eric Clapton y los actores Jack Nicholson, Ann Margret, Oliver Reed y Robert Powell. Es musical muy alocado, lleno también de simbolismos y una historia que aborda la búsqueda de conexión emocional, espiritual y social que lastima. El punto débil para quien la ve por primera vez y no es fanático de los musicales es que es un poco larga, aunque bien puede disfrutarse por partes; los números musicales de Tina Turner y el de Elton John son fantásticos.
Across the Universe
Jim Sturgess
Photo Credit: Abbot Genser
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Seguimos por la línea del rock con este musical de Julie Taymor ambientado en la década de los sesenta y la música de The Beatles. Esta belleza de película tiene personajes entrañables, retrata el ambiente desde distintos frentes de la sociedad de los Estados Unidos y Reino Unido y utiliza las temáticas que siguen encabezando las agendas del mundo: la guerra, los derechos civiles, el amor libre, la libertad sexual o las represiones del Gobierno.
Si bien el hilo conductor es una historia de amor, esta se encuentra libre de lugares comunes. Sin duda es un musical muy recomendable, lleno de adaptaciones preciosas de la música del cuarteto de Liverpool. Across the Universe forma parte de una nueva ola de musicales hechos con mayor riqueza en la narración visual, ideal para los más reacios a ver musicales.
Mouling Rouge!
Otro musical impactante es este del director Baz Luhrmann. En él participan Nicole Kidman y Ewan McGregor, quienes aportaron también su voz para los números musicales. La música en la cinta son adaptaciones de canciones pop muy famosas y claro, el estilo de Luhrmann encontró aquí su máxima expresión: teatralidad en cada escena, diálogo y número musical. Está llena de detalles, colores y ostentosos vestuarios.
Rent
De esta lista Rent es el que tiene el formato más tradicional de musical; más que nada porque es una adaptación cinematográfica de la obra homónima de Broadway, incluso participan en la cinta actores originales de la versión para teatro. Si se incluye en estas recomendaciones es porque Rent! tiene una conmovedora historia y unos números musicales impresionantes y además los personajes son lo opuesto a los personajes rosas y melosos; por el contrario son complejos y con problemas reales y muy fuertes. Es un musical que pone en alto el amor y que, como pocos, habla de este en todas sus variantes sin importar géneros o preferencias sexuales.
South Park: Bigger Longer & Uncut
Para cerrar con broche de oro esta película de Trey Parker que rompió cualquier cliché que existiera en las series animadas, en la forma de abordar temas tabú y en los musicales. A esto le añadió su humor irreverente y entregó una cinta que sorprendió tanto a fans de la serie como a aquellos que no la habían visto antes. Así pues, esta cinta bien puede acabar con la idea de que los musicales son todos y cada uno aburridos y sosos.
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