10 trabajos y ocupaciones obsoletas que ya no existen

Estos son algunos trabajos que ya no existen por el avance de la tecnología e inventos que los condenaron a la obsolescencia.

Con el paso del tiempo, muchos empleos se han transformado por el uso de nuevas tecnologías; por la automatización de procesos y el uso de maquinaria que los agiliza. Los siguientes empleos han desaparecido por completo, bien por lo mencionado líneas atrás o bien por que su labor resultó anacrónica o una falacia para las sociedades, al paso de los años.

Pregonero

"Town crier" de Reino Unido

En distintos países la figura del pregonero era vital para conocer las noticias e informes más relevantes en las comunidades. En España y sus colonias, los pregoneros daban a conocer los informes oficiales, información importante, el estado del clima. Su antecedente más antiguo se ubica en los praecones romanos. Ha habido pregoneros en muchos países, como Estados Unidos, Reino Unido, y en algunos aún se les puede ver en fiestas tradicionales y festividades.

Colchonero

Sumamente ligado a la historia de los colchones y cómo su confección cambió con el paso del tiempo. Los colchoneros se dedicaban reparar, rellenar y fabricar colchones de lana que fueron muy usados hasta el siglo XX en España y las colonias latinoamericanas. Su actividad era ambulante y recorrían distintas localidades para ofrecer sus servicios.

Despertadores

A los conocidos "knocker up" era común escucharlos en Irlanda y Gran Bretaña a finales del siglo XVIII. Su trabajo consistía, tal cual, en despertar a las personas para que fueran a trabajar, tocando en las ventanas con varas o piedras. Durante la época de la Revolución Industrial, los servicios de los despertadores era vital para los trabajadores de las fábricas.

Médico de la peste negra

Las diferentes epidemias que azotaron en la Europa medieval dio origen a este oficio. Los médicos de la peste negra estaban dedicados a atender a los enfermos de las epidemias, y su presencia se extendió en casi toda Europa. Su atuendo más característico es el de la imagen que acompaña esta sección, sin embargo, se sabe que variaba según el tiempo y el lugar. En su máscara, que tiene forma de un pico de ave, depositaban aromas para mitigar el olor de los pacientes y para no contaminarse, pues estaba muy arraigada la teoría miásmica de las enfermedades, que sostenía, de forma concreta, que las enfermedades se propagaban por aires venenosos. La vara que llevaban era usada para tocar a los pacientes. También auxiliaban a los pacientes con sus herencias, y llevaban registros de las víctimas.

Operadoras

Las centrales telefónicas antes de ser automáticas eran operadas por personas, particularmente por mujeres, quienes hacían posible la conexión de las llamadas. La central automática fue inventada en 1888 por Almon Strowger y poco a poco fue sustituyendo el sistema manual; aunque las operadoras manuales aún estuvieron vigentes durante buena parte del siglo pasado.

Serenos

En Madrid, España, en 1798 se institucionalizaron los serenos, a los que se unía el oficio de farolero, encargados de encender las luces públicas. Los serenos se encargaban de vigilar las calles, hacer rondas nocturnas e informar el estado del tiempo. El oficio de los serenos se extendió en España y en países de América Latina. Es muy común recordar la frase: "Las doce y todo sereno".

Frenólogos

Estos especialistas de la frenología, hoy considerada pseudociencia, determinaban la personalidad, el carácter y las posibles tendencias criminales según la forma del cráneo, cabeza y las facciones. Fue una teoría desarrollada en 1800, y muy popular durante el siglo XIX. En la Inglaterra victoriana, incluso, se fundó la sociedad frenológica de Edimburgo. Los postulados de la frenología aseguraban la inferioridad de la raza amerindia y la poca capacidad de las mujeres para ciencia y las artes. ¯_(ツ)_/¯

Gandy dancers

En este oficio que tuvo su auge durante la construcción ferroviaria en Estados Unidos a principios del siglo XX, podían verse trabajadores de distintos orígenes: nativos americanos, inmigrantes irlandeses, italianos, chinos, mexicanos y afroamericanos. Su labor consistía en instalar y reparar las vías y los durmientes que durante mucho tiempo estuvieron hechos de madera, por lo que tenían que ser reparados y sustituidos. Los trabajadores afroamericanos se caracterizaron por sus cantos mientras realizaban este duro oficio.

Cazadores de ratas

En realidad este oficio solo se ha transformado, de hecho se trata de un oficio muy antiguo que data desde la época medieval. Las ratas en las ciudades han sido muchas veces un gran problema sanitario, y los cazadores de ratas se exponían a grandes peligros de enfermedades y mordeduras. Las actuales compañías de control de plagas incluyen este servicio, además que hay diversos métodos caseros para este cometido. Así que, aunque la figura como tal del cazador de ratas está en desuso, no así estos roedores.

"Escuchar el cielo"

Antes de la invención del radar (del que Nikola Tesla estableció los principios teóricos), escuchar el cielo era de vital importancia para los ejércitos enemigos en la I Guerra Mundial. Esto podía ser una diferencia de vida o muerte. Grandes aparatos, localizadores acústicos, eran operados por personas para esta labor. Con el radar, tanto la tecnología, como los encargados del oficio, quedaron en la obsolescencia.

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